Ayer, lunes 18 de octubre, el párroco emérito de l'Eliana, Ricardo Arnau Zamorano, cumplía 90 años y la alcaldía de l'Eliana, presidida por Salva Torrent, organizó un emotivo acto para rendir un merecido homenaje al sacerdote que estuvo a cargo de la vicaría de nuestro pueblo casi 50 años.
El evento, que tuvo lugar en el salón de eventos del Centro Sociocultural, fue toda una sorpresa para el homenajeado que no supo del mismo hasta muy cercano el momento de la celebración. La convocatoria contó con una nutrida asistencia de los vecinos de l'Eliana que se personaron en el recinto para disfrutar de una magnífica velada dirigida por la concejala, Marta Andrés, y en la que se encontraba su familia, viejos amigos de Don Ricardo, además de representantes de la vida política, cultural y social del pueblo.
Entre los asistentes estuvieron los que fueran también alcaldes de la localidad, Vicente Tarrazona y José María Ángel, actual Secretario Autonómico de Emergencias, el alcalde de l'Eliana, Salva Torrent con los concejales de su equipo de Gobierno, representantes del Partido Popular, con Ma José Marco, su portavoz al frente, el Juez de Paz y presidente del Centre d'Estudis Locals de l'Eliana, Rafa Desco, además de numerosos representantes del tejido asociativo del pueblo.
La ceremonia fue amenizada con diversas intervenciones ciudadanas de personas cercanas de una u otra manera al sacerdote, que resumieron oralmente la larga trayectoria de Don Ricardo, que no se limitó tal y como explicaron a la vida religiosa del párroco, hijo adoptivo del pueblo, sino también a su actividad durante años por la promoción de la cultura y como uno de los primeros transmisores de la 'llengua valenciana' en el pueblo en su homilías, además de su importante contribución en la fundación de la Biblioteca Municipal y el Centre d'Estudis locals de l'Eliana
La fiesta culminó con la actuación de la Escola Coral de l'Eliana, que conmovió a los asistentes con tres estupendas interpretaciones como el 'Aleluya de Cohen', 'D d'un temps, d'um país de Raimon' y el 'Ave María de Sthubert'.
Una gigantesca tarta de cumpleaños de nueve pisos -una por cada década cumplida- obsequió de su familia puso el punto y final a la celebración de los 90 años de Don Ricardo.
