Día Mundial contra
el Cáncer de Mama
El cáncer no se ve, se siente
El 19 de octubre se celebra el ‘Día Mundial contra el Cáncer de Mama’. Este tipo de cáncer es el más frecuente entre las mujeres occidentales con 20.000 diagnósticos al año, sólo en España. Bajo el eslogan ‘YO HES UPERADO EL CANCER DE MAMA'Podemos ayudarte’ la Asociación Española Contra el Cáncer pretende informar de lo que ocurre después de que a una mujer se le haya diagnosticado esta enfermedad.
El cáncer se caracteriza por el crecimiento incontrolado y la diseminación de las células. Es una enfermedad genética. Ocurre como consecuencia de cambios en la composición del material genético de las células que alteran su división y funcionalidad. Para que se produzca un cáncer es necesario que los factores cancerígenos actúen de forma continuada y se produzcan alteraciones celulares acumulativas durante un largo periodo de tiempo, generalmente años. El cáncer de mama es el tumor más frecuente en la población femenina española. Se estima que una de cada nueve mujeres padecerá cáncer de mama en algún momento de sus vidas.
La campaña contra el cáncer de mama es una de las acciones más emblemáticas que realiza la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) a lo largo del año. La celebración de este día es una ocasión para destacar mensajes concretos relacionados con la detección precoz del cáncer de mama. Una oportunidad que permite que el mensaje de salud salga a la calle y llegue al conjunto de los ciudadanos. El cáncer de mama supone la segunda causa de muerte en nuestro país. Gracias a los programas de detección precoz y a los avances en el diagnóstico y tratamiento, cada día es mayor el número de mujeres que viven con el cáncer de mama y lo superan. Teresa Olmos Martínez, oncóloga en el Centro de Diagnóstico de la Junta Provincial de Valencia de la AECC afirma que “si se diagnostica a tiempo existe un 85% de posibilidades de curación”.
Factores de riesgo y prevención
La aparición de un nódulo en la mama que previamente no existía, dolor en la palpación, cambios de tamaño, irregularidades en el contorno, menos movilidad en uno de los pechos al levantar los brazos, alteración en la piel, cambios en el pezón o aparición de un nódulo en la axilas; Son todos síntomas de alerta. Sin embargo la mayoría de los cánceres incipientes son asintomáticos.
Entre los factores de riesgo hay que tener en cuenta los antecedentes personales, los factores genéticos y familiares, factores hormonales y dietéticos, enfermedades benignas y agentes ambientales. La doctora Olmos explica que “no existe una vacuna contra esta enfermedad porque se desconoce el agente causal de la misma pero sí existe el radiodiagnóstico como la mejor medida de prevención”. El riesgo de padecer cáncer de mama puede reducirse modificando hábitos de conducta. Llevar una vida saludable, con ejercicio físico regular, dieta equilibrada, evitando el alcohol y no fumando. Toda mujer puede disminuir el riesgo de padecer un cáncer de mama con pequeños cambios en su estilo de vida.
La AECC proporciona asesoramiento sobre los distintos recursos existentes a las personas que padecen cáncer de mama. Les ayudan a gestionar ayudas sociales y económicas y ponen a su disposición un servicio de préstamo gratuito de material ortoprotésico. Además, ofrecen la posibilidad de conocer a otras mujeres que han pasado también por la enfermedad. Todo de forma gratuita.
La importancia de la mamografía
La mamografía es una prueba muy sencilla y rápida que permite detectar el 90% de los tumores. Sin embargo, el miedo al diagnóstico, la falta de percepción del riesgo y la pérdida de confianza en la prueba son las principales causas por las que todavía, un 9% de mujeres no se han hecho nunca una mamografía. Consiste en la realización de una radiografía especial de las mamas con un aparato de rayos X. Según la doctora Olmos “es una prueba cómoda, rápida y muy rentable”. Es la manera más eficaz para diagnosticar precozmente un cáncer de mama y es indolora. La recomendación más efectiva es que “las mujeres de entre 45 y 69 años se hagan esta prueba cada uno o dos años siguiendo las invitaciones que la Consellería de Sanidad dirige a este grupo de población femenina” explica la especialista. Además es muy aconsejable participar en las campañas de detección precoz aún cuando no se sientan síntomas. Si se tiene menos de 45 años y antecedentes familiares de cáncer de mama sería conveniente hacerse una mamografía. Si se padece algún síntoma, aún no estando en el grupo de riesgo, es importante que se acuda al médico. En algunos casos se puede solicitar al centro de diagnóstico de la AECC de Valencia una prueba. Teresa Olmos aclara que “el centro de la AECC también realiza mamografías a mujeres que no se encuentran en estos límites de edad o que por alguna razón no se encuentren censadas dentro de los padrones municipales”. No hay que olvidar que la autoexploración es importante pero nunca sustituirá a una mamografía.