Un asunto de vital importancia
El 3 de noviembre es día de donación de sangre en L’Eliana
La donación de sangre es una de las acciones más loables y solidarias que puede ejercer una persona en beneficio de la salud pública y privada. Muchas veces no somos conscientes de lo mucho que se puede ayudar con un acto tan sencillo. Cada día, 45 personas salvan su vida en España gracias a las transfusiones de sangre. La unidad móvil del Centro de Transfusiones de la Comunitat Valenciana se traslada periódicamente a L’Eliana para recoger sangre de los voluntarios. El jueves, 3 de noviembre, estarán en el Centro de Salud de la calle Rosales de 17:30 a 20:00 h.
Tu sangre, además de salvar vidas puede ayudar en casos de anemia, hemofilia, leucemia o a enfermos de cáncer cuyas plaquetas se destruyen con tratamientos de quimioterapia. La sangre es imprescindible para realizar trasplantes de órganos e intervenciones quirúrgicas y también en accidentes, hemorragias, quemaduras y un largo etcétera. En la actualidad todavía no se ha conseguido desarrollar ningún sustituto que permita prescindir de este tejido biológico que es la sangre. La única manera de conseguirla es mediante la donación voluntaria y altruista de personas solidarias.
Pocos países en el mundo tienen organizado un sistema público de donación de sangre como el establecido en nuestro país. En España la compraventa de sangre está totalmente prohibida. La sangre se considera un recurso público únicamente destinado a instituciones sanitarias para el tratamiento de pacientes y cuya entrega es totalmente voluntaria. En los países en que no existe tal sistema, la donación es realizada por familiares o se actúa mediante pago para encontrar un donante.
¿Quién puede donar?
El principal requisito para donar es la voluntad de cualquier persona para realizar un acto desinteresado y solidario. No obstante, existen una serie de condiciones, exigidas por ley, motivadas por la necesidad de proteger tanto la salud del donante como la del paciente que recibe la sangre. Sólo se permite donar a personas mayores de 18 años, que pesen más de 50 kg y que gocen de buena salud. Las recomendaciones indican que se puede donar cada dos meses, no más de tres veces al año las mujeres y no más de cuatro los hombres. Felicidad Jiménez Navarro, de 55 años y donante de L’Eliana, donó sangre por primera vez cuando un amigo tuvo un accidente y la necesitaba urgentemente para la operación. “Fuimos toda la familia pero por distintas razones solo pudimos donar mi padre y yo. Nunca he necesitado sangre pero me pongo en el lugar de esas personas que sí la necesitan y no me lo pienso dos veces”.
Otro donante del municipio es Ximo Illueca. Lleva la cuenta de las ocasiones en las que ha donado su sangre. En el momento de la entrevista iba por la donación número 54. “Empecé en la mili, a los 19 años”. Ahora, cada vez que puede se acerca al banco de sangre. “Me parece importante colaborar. Me gustaría que si alguna vez yo necesitara sangre, también hubiera para mí”.
La pre-donación
La donación es un acto bastante sencillo. La doctora Ángela Fernández, médico del equipo móvil afirma que “muchas personas acuden con buena voluntad pero con poca información”.
Cada vez que se dona, el centro de Transfusión de la Comunitat Valenciana entrega una breve documentación que el voluntario debe leer cuidadosamente como paso previo a la donación. Seguidamente debe contestar a un cuestionario de autoexclusión. Ángela Fernández explica que “este cuestionario pretende proteger tanto la salud del donante como la del receptor, por lo que es muy importante rellenarlo con seriedad y rigor. Además, la información expuesta en el mismo es totalmente confidencial”. Tras estos pasos previos a la donación, el equipo médico realiza una entrevista para comprobar el estado de salud y posibles actividades de riesgo de cada persona. Una vez valoradas todas las respuestas se realiza una toma de constantes y finalmente, con todos los datos a la vista, se decide si la persona puede donar o no.
La donación
La extracción en sí, es un proceso bastante simple e indoloro que dura unos quince minutos durante los cuales se recogen 450 cc de sangre. Al terminar se recomienda tan solo reposar unos minutos e ingerir algún líquido.
¿Y después?
Tras la donación, la bolsa de sangre recogida se somete al proceso de identificación para conocer el grupo sanguíneo del donante. Luego la bolsa pasa al laboratorio de fraccionamiento y allí se expone a un proceso de centrifugado, que permite la separación de cada uno de sus componentes (plasma, glóbulos rojos y plaquetas). Los laboratorios de serología e inmunología son los últimos trayectos por los que atraviesa la sangre donada. Es en este punto en el que es analizada para descartar posibles enfermedades. A continuación, y tras pasar los más severos controles de seguridad, la sangre está en disposición de ser útil a un posible receptor.
La doctora Ángela Fernández explica que, “si en este proceso se detecta algún problema con la sangre del donante, como por ejemplo una enfermedad, se procede a llamarle por teléfono para advertirle y asesorarle”. La médico afirma que en la labor de donación que lleva a cabo el Centro de Transfusión de Sangre de la Comunitat Valenciana, “lo más importante es cuidar y mimar al donante”.
Un regalo para todos
El acto de donar sangre en sí mismo revierte en una serie de beneficios específicos para el organismo del voluntario. La ventaja para el donante de sangre se encuentra en la regeneración de su propio líquido sanguíneo lo que permite un mayor rendimiento de su sistema circulatorio.
Donar sangre es en sí el acto más importante. Es un regalo, un gesto voluntario y solidario del que nos beneficiamos todos, donantes y receptores. Pero sobre todo, porque mañana puede ser que quién necesite sangre seas tú o alguno de los tuyos.
