JOSEP TORRENT
Un histórico del periodismo valenciano nacido en l'Eliana
Tras casi 18 años al frente de la dirección de la delegación del diario EL PAÍS de la Comunidad Valenciana y más de 40 en el oficio, el prestigioso periodista confiesa que su salida del rotativo más importante a nivel nacional hace unas pocas semanas , no significa su retirada de la información. Al contrario, Pep Torrent, como le llaman en confianza, baraja distintas posibilidades de continuar en los medios. “Seguiré haciendo lo que sé hacer. Estaré en la mina, aunque no a tiempo completo como hasta ahora, porque todavía tengo cosas que contar y preguntas que hacer”. Desde su abultada experiencia Josep Torrent, habla con Vivaleliana! de la situación del periodismo actual, de la crisis que están atravesando los medios de comunicación en general, del periodismo ciudadano emergente en las redes sociales y por supuesto de la economía y política.
Lo único que de verdad motivará el cambio es la situación económica. La corrupción puede ser un ingrediente añadido. El ciudadano puede aceptar a un político corrupto si es eficaz, y no a uno honrado, si no lo es.
Ha dejado la delegación valenciana del diario EL PAIS hace apenas un mes ¿En qué situación se ha producido su baja?
EL PAÍS como todos los medios de comunicación ha sufrido los envites de la crisis. Su personal ha mermado en casi un 60% y 70% en algunos casos. Sobre todo en las delegaciones periféricas para dar paso a redacciones más pequeñas. En el caso de la delegación de Valencia pasamos de estar 22 personas a 8. Yo he entendido este proceso llegando a un acuerdo con la empresa en la que he desarrollado mi labor los últimos 18 años. Digamos que voluntariamente me adherí a ese proceso.
¿Entonces no se retira y va a seguir haciendo periodismo?
No me marcho del periodismo. Estoy a la espera de algunas propuestas que todavía no puedo decir cuándo cristalizaran. De momento empezaré con una colaboración en un nuevo semanal de papel, El Plaza, que sale en breve. Lo que tengo claro es que no dedicaré todo mi tiempo a estar en la mina permaneciendo 12 o 14 horas en una redacción.
¿Cómo ha afectado la crisis al periodismo?
No hay ningún medio al que la crisis no haya golpeado. Pero sin duda, la construcción y la comunicación han sido a mi juicio los dos sectores más afectados en nuestro país. Eso unido a que la demanda es muy grande y la oferta muy pequeña –y a que los ingresos por publicidad han disminuido- el trabajo en este sector está muy difícil.
Con respecto a eso que se conoce como el periodismo ciudadano, el de las redes sociales, los blogs, los vídeos, las fotos en el lugar de los hechos ¿Piensa que cualquiera puede hacer periodismo?
Rotundamente no. El periodismo de verdad es capaz de argumentar, articular una noticia o un reportaje. En el que la información se trata con rigor, se contrasta. Eso exige profesionalidad y preparación. Lo otro, es información que tiene su valor como denuncia, llamada de atención, por estar en el momento oportuno en el sitio oportuno. Es información pero no es periodismo. Hay webs informativas que sigo con interés. Pero debo decir que es importante saber quien está al frente de ellas.
¿Quién tiene el poder en los medios actualmente la empresa o el periodista?
La empresa evidentemente tiene como finalidad ganar dinero. Los periódicos, los medios son empresas que velan por sus intereses y cuenta de resultados. Eso condiciona su línea editorial. Los periodistas tienen menos libertad a veces para criticar al poder. Pero a su vez la publicidad te permite la libertad de expresión.
¿El diario EL PAÍS ha cambiado en los últimos tiempos?
Como me gustan las definiciones del siglo XIX, diré que periódicos europeos son o liberales conservadores, o liberales progresistas. Creo que en el diario EL PAÍS se hace el mejor periodismo que se puede. Ha sufrido cambios pero en lo esencial sigue siendo lo que siempre ha sido: un espacio de centro izquierda liberal.
¿Piensa que a los profesionales del periodismo les falta el corporativismo que en otros colectivos profesionales sobra?
Pues sí. El periodista es por defecto una persona vanidosa e individualista. Quiere ser el primero en tener un titular, una primicia y no va a compartir su información fácilmente. Lo Lleva escrito en su ADN.
¿Animaría en los tiempos que corren a que los jóvenes sigan estudiando para este oficio?
Ahora estamos en tiempos bajos. El periodismo ha ido acorde con los tiempos. En los 70 pasábamos hambre. En los 80 teníamos sueldos medianamente razonables, a finales de los 90 y mediados del 2.000 íbamos mejor. Creo que siempre habrá periodistas que puedan desarrollar su trabajo en el mundo de la comunicación en general. Llevando gabinetes de comunicación de empresas o instituciones, blogs, las redes. Los periodistas de hoy están muy bien preparados y buscan salidas.
Yo soy un indignado ya de serie con respecto el tema de la corrupción, tanto a nivel nacional como autonómico. Los escándalos y la corrupción que se han producido en esta Comunidad son de toma, regala y vende. Parece que ya tenemos agotada la capacidad de asombro y que normalizamos estas situaciones.
¿Qué opina de iniciativas como la de DROMÓNAMOS del joven periodista elianero Pablo Ferri?
Ese tipo de periodista es muy muy periodista. Lo lleva tan dentro que no le teme al peligro. Trabajar de manera itinerante en Latinoamérica para hacer reportajes de ese calibre, sinceramente me da envidia. Pero es una opción arriesgada y yo diría que hasta inconsciente. En muy poco tiempo ha recibido importantes premios periodísticos, entre ellos el Ortega y Gasset 2014. Sí, me da envidia.
¿Qué ingredientes debe tener una buena entrevista?
Preguntas cortas, respuestas cortas y complicidad con el entrevistado. Eso se consigue manipulando la información. Condensando. No puedes poner en una entrevista todo lo que te cuenta el entrevistado porque nadie la va a leer nadie, ni el mismo.
¿Qué siente con respecto a la actualidad política que se vive en el país y sobre todo en la Comunidad Valenciana?
Yo soy un indignado ya de serie con respecto el tema de la corrupción, tanto a nivel nacional como autonómico. Los escándalos y la corrupción que se han producido en esta Comunidad son de toma, regala y vende. Parece que ya tenemos agotada la capacidad de asombro y que normalizamos estas situaciones. Somos inmunes e impunes con la corrupción.
¿Y cómo hemos llegado a aceptar todo esto?
Porque lo único que de verdad motivará el cambio es la situación económica. La corrupción puede ser un ingrediente añadido. El ciudadano puede aceptar a un político corrupto si es eficaz, y no a uno honrado, si no lo es.
¿Por eso han votado al PP tantas veces en nuestra Comunidad?
Sí. Un chico sin casi preparación, trabajando en la obra, con un sueldo de 3.000€, ha podido durante mucho tiempo comprarse un coche nuevo cada dos años, tener una casa en propiedad, acceder al crédito sin dificultades. Políticos y los empresarios han vivido la normalidad de los grandes chalets, los viajes, los yates .Una situación que se ha acabado. Por creo que esta vez las cosas van a cambiar en la Comunidad Valenciana.
Desde su experiencia ¿Quién cree que va a ganar en la Comunidad Valenciana las próximas autonómicas?
Esta vez el PP las van a perder. Supongo que una unidad entre izquierdas es lo más probable.
¿Por último Vd. que ha hecho tantas entrevistas ¿Cómo se consigue sacar la verdad de lo que te cuenta un político?
Preguntando mucho y repreguntando otra vez. Siempre hay un renuncio a pesar de que llevan el guión memorizado.