María José Monzó nació en Quart de Poblet en 1960 pero su vida está estrechamente vinculada a l’Eliana desde hace casi 30 años, cuando decidió darle el sí y casarse con Enrique Daries, un elianero por los cuatro costados , con el que eligió formar una familia y vivir en este pueblo que hoy considera como suyo propio. Maestra y psicóloga de profesión, María José es madre de dos hijos, Quique y Begoña de 26 y 23 años, respectivamente. “Ellos y mi marido, han sido, son y serán siempre lo primero en mi vida. Luego está el trabajo y después todo lo demás” - explica - con gesto sereno, voz dulce y porte elegante.
¿Dónde estudiaste y a qué te dedicas?
Estudié en el Sagrado Corazón de Mislata hasta 3º de BUP, de allí pasé al instituto de Manises donde acabé COU. Más tarde accedí a la escuela de Magisterio en Cheste, donde me formé como maestra. Luego entré a la Universidad y terminé Psicología. Trabajo desde hace 30 años en el Colegio El Prat de Lliria.
¿Eres maestra por vocación?
Sí, me encanta enseñar y me gustan mucho los niños, por eso decidí estudiar magisterio. En un primer momento mis padres querían que me dedicara a la empresa familiar de cerámica que teníamos en Manises, pero yo les dije que no, que yo quería estudiar. Mi abuela materna me alentó en aquellos primeros momentos y por supuesto mis padres también lo entendieron. Al terminar magisterio me puse con Psicología y casi inmediatamente después llego el trabajo y además me casé.
Eres una mujer de tu tiempo, trabajadora, profesional y madre de familia ¿Cómo se conjuga eso?
Pues con mucho tesón, paciencia y decisión. En muchos momentos he pensado cómo podía hacer todo eso al mismo tiempo y en muchas ocasiones sola. Mi marido por razones de trabajo y también cuando estaba en la política en activo – fui concejal por el PP durante tres legislaturas- tenía unas jornadas maratonianas. Pero se asume y se puede.
¿Cómo llegas desde Quart de Poblet a l’Eliana?
Nací en Quart pero vivía en un chalet en Ribarroja. En la urbanización éramos una pandilla de amigos y solíamos salir e ir de fiesta a las poblaciones cercanas. Por supuesto también a l'Eliana. En una de esas salidas conocí a Enrique. Y aunque nuestra relación no se consolidó hasta unos años después, a mi me gustó desde el primer momento. Por su cumpleaños le llamé y quedamos. En nuestra primera salida me invitó cenar al restaurante El Chalet. Hasta hoy ha habido un largo recorrido junto a Enrique aquí en l’Eliana. Un pueblo del que ahora digo que es mi pueblo también, en el que mi marido tiene todo su arraigo, sus raíces y su familia.
¿Te sentiste acogida aquí?
Al principio me costó. Supuso un cambio total en mi vida sin mi familia. Además acababa de perder a mi madre repentinamente. Pero tanto Enrique como yo decidimos de mutuo acuerdo que fuera l’Eliana el lugar en el que viviríamos. A Enrique nada ni nadie le hubiera movido de l’Eliana. Todo cuajó casi al mismo tiempo. La boda, terminar mi carrera y el trabajo como docente en una población vecina. Así que l’Eliana se convirtió poco a poco también en mi pueblo. Hoy por hoy, cuando voy por ahí o cuando salgo, siempre que hago referencia a l’Eliana, lo hago “como mi pueblo”, aunque no haya nacido aquí.
En l’Eliana se te conoce como María José Monzó de Daries...
Eso es algo que al principio no me gustaba mucho, eso del “de”. Pero ahora lo asumo como natural. La familia Daries es una familia de las de toda la vida de l’Eliana. El padre de Enrique fue alcalde de este pueblo durante 25 años. Mi marido fue concejal durante tres legislaturas. Un apellido que por esas razones ha estado muy ligado a la vida política y social de l’Eliana. Aunque tengo que confesar que siempre me he mantenido al margen de partidos y de la política en general.
¿Vives en el casco urbano, no?
Si en invierno estamos en pleno centro, encima del estanco al lado del Ayuntamiento. Cada día me sorprendo más de todo lo que hay en l’Eliana. Soy testigo presencial de lo que ocurre casi cada fin de semana en la plaza. L’Eliana ha cambiado mucho de aquel pequeño pueblo que yo conocí hace más de 30 años.
¿Perteneces a alguna asociación?
En realidad me he dedicado a trabajar y cuidar a mi familia siempre. Cuando los niños eran pequeños estaban apuntados a la falla de la Puríssima – Josep Antoni. Mi marido también es miembro del Rotary Club de l’Eliana. Este próximo año seré la Clavariesa Mayor del altar de la Associació Sant Vicent de l’Eliana. Es una deuda que tengo pendiente tras salvar un momento delicado de salud del que ya me he restablecido
¿Cómo podríamos definir a María José Monzó?
Soy una mujer de mi tiempo. Profesional que trabaja fuera de casa y que cuida de su familia también. Que con el paso del tiempo y tras momentos de dificultad, ha aprendido a disfrutar de los pequeños momentos que brinda la vida. Creo que soy una mujer serena, resolutiva y práctica. Que ha afrontado sus miedos con naturalidad y que sabe que lo importante es sobrevivir.
Terminamos con la pregunta que siempre cierra esta entrevista ¿Qué significa para ti l’Eliana?
L’Eliana es el sitio del nunca me voy a ir. L’Eliana son como mis pulmones. La necesito para vivir. L’Eliana es mi pueblo.