Hoy celebramos el Día Internacional de la Mujer, y es curioso cómo algunas mujeres relativamente jóvenes como yo, somos conocedoras activas de la celebración de este día hace pocos años. Ya que nuestras abuelas y en algunos casos incluso nuestras madres no tenían la inquietud que ha crecido en nosotras, las más jóvenes, las hijas del Feminismo. Afortunadamente cuando en muchas mujeres no había mentalidad Feminista, ahora la hay en sus hijas y nietas.
Lo mismo pasa con la VIOLENCIA de GÉNERO. Cuando hasta hace también muy poco tiempo muchas de nuestras antepasadas eran víctimas de la VIOLENCIA familiar o de género, ni ellas mismas eran conscientes de que estaban siendo sometidas y oprimidas. Ahora, muchas de nosotras tenemos una conciencia colectiva contra la VIOLENCIA que se ejerce sobre nosotras por el hecho de ser mujeres. Cuando había ausencia de justicia, ahora existe una Ley de Violencia de género y familiar. Y aunque en demasiadas ocasiones no protege como debería, es un paso muy importante para las hijas de la represión patriarcal, que somos todas. Cabría destacar que para conseguir que las leyes funcionen, el patriarcado toque su fin y se pueda alcanzar una igualdad real, necesitamos que los hombres la entiendan y la apoyen. Afortunadamente muchos de ellos ya lo hacen.
Entre todas y todos debemos trabajar todos cada día del año para alcanzar aquellas metas que nos marcamos las personas y colectivos como el que represento, en el que defendemos la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres que claramente estamos en desventaja por las barreras estructurales de género.
Me gustaría recordar en este día a las mujeres y niñas y niños víctimas de la violencia de género. Por ellas y ellos debemos honrar su memoria y luchar todos los días del año contra la VIOLENCIA que se ejerce sobre ellas y sus hijas e hijos.
Por último queremos felicitar a las mujeres de este país, las de ahora y sobre todo a las de antes. Ya que sin ellas y sin su lucha aunque algunas de ellas no eran conscientes de ser víctimas del pratriarcado, las hijas del 8 de marzo no estaríamos reivindicando este día. Nuestra reivindicación es la mejor herencia que podemos dejar a nuestras hijas e hijos.
Gloria Megías. Representante del colectivo feminista de L’Eliana, Igualtat i Punt.