Este viernes 26 de enero, a partir de las 19.00h, la periodista y escritora valenciana, Premio Nadal 2014 y actual Secretaria General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat Valenciana, estará entre nosotros en una nueva edición del espacio cultural ‘Trobades Literaries’, que dirige el librero impertinente, Lluis Andrés, para presentarnos su nueva novela ‘Basta con vivir’. Le acompañará en la mesa amigos de fatigas y amigos del alma, como la psicóloga radicada en l’Eliana, Carmina Palau y también el ex alcalde de nuestro pueblo y actual Director General de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias -112- José María Ángel, que también forman parte de los personajes que intervienen en ‘Basta con vivir’
Carmen, amabilísima y siempre dispuesta con nuestro medio, www.vivaleliana.com, ha hecho un alto en el camino para atendernos y charlar sobre su nueva obra, sus sensaciones y el porqué la pluma, o mejor dicho el ordenador, están presentes siempre en su vida para hacer lo que más le gusta: escribir.
'Basta con vivir'… un título sugerente, poético y esperanzador ¿Cómo resume el contenido de esta tu última novela?
Basta con vivir es una novela que habla de muchas cosas: habla del dolor, de todas las caras del dolor y de la ceguera de quienes aparentemente no lo sufren; habla de la trata de personas, de esa terrible realidad que ocurre delante de nuestros ojos sin que tampoco queramos verla; habla de ese egoísmo que nos hace permanecer ciegos ante lo que acabo de decir, pero también habla de la generosidad que también está dentro de nosotros y nos hace ayudar a otros y ayudarnos a nosotros mismos; habla de la fantasía, de la necesidad de fantasear las vidas que queremos para empezar a vivirlas de alguna forma. Y sobre todo habla de la vida, de la vida que pasa cada día ante nosotros y que si nos descuidamos, pasa de largo. Y todo esto, a través de dos personajes, Pepa, una mujer solitaria y enfadada con el mundo, y Crina, una chica obligada a prostituirse por su propia pareja, que no tienen nada que ver hasta que esta vida las junta en el mismo sitio al mismo tiempo, y resultan fundamentales la una para la otra.
320 páginas en las que las protagonistas son dos mujeres muy distintas, con problemáticas también distintas, Crina y Pepa ¿Los personajes de las mujeres te permiten escribir mas holgadamente sobre las situaciones cotidianas, los sentimientos, las emociones, los problemas?
No es una elección consciente, o al menos no en ese sentido. Pienso que mis novelas están protagonizadas por personas a las que les ocurren cosas que las transforman, y muchas veces son mujeres y otras veces son hombres.
“Al final una es lo que es, y yo soy escritora. Escribir para mí es una necesidad, que está por encima de otras muchas como dormir o salir a cenar. He escrito esta novela robándole muchas horas al sueño".
¿Por qué crees que “Basta con vivir” cuando a veces la vida puede ser tan dura para algunas personas? ¿No crees que es una afirmación demasiado positiva?
No, de verdad. Creo que es una frase tan real como que a las doce es mediodía. Para vivir basta con querer vivir, con no pegarte tiros en el pie, con no ser tu propio enemigo, con relativizar. Es verdad que hay problemas que parecen irresolubles pero… ¿cuántos son? ¿dos,tres? Y no todos los que nos hacemos, continuamente, a diario. Yo no soy psicóloga, ni socióloga, ni experta en nada. Hablo por mí: para mí los problemas graves son muy pocos, y casi todos tienen que ver con la salud de mis seres queridos, con su bienestar. Todo lo demás, se puede solucionar no digo que con el poder de nuestra mente ni mucho menos, pero sí digo que la actitud es fundamental para ser capaces de ver las salidas.
Carmina Palau es una vecina de nuestro pueblo, psicóloga de profesión. Una persona real que cobra vida como personaje en cada una de tus novelas… y en esta última con mayor presencia todavía. ¿Podías explicarnos la figura y por qué siempre está presente en tu literatura?
No creo que esté más presente en esta novela, aunque sí es verdad que en ésta es determinante, pero Carmina Palau está siempre en mis novelas porque está siempre en mi vida. Empezó como un juego, un juego que hago con mucha gente a la que quiero y a la que de alguna forma rindo homenaje poniendo su nombre a un personaje, pero ya no concibo escribir una novela sin que Carmina esté en ella ayudando a los protagonistas a vivir una vida mejor.
Tres años han pasado desde que ganaste el premio Nadal 2014 con ‘La vida era eso’ … una novela de calado … y muchas cosas han llovido desde entonces. De concejala de tu pueblo, Picanya a Directora General de Cultura en la Generalitat Valenciana, entre otras cosas, con toda la responsabilidad que conlleva el día a día. ¿Cómo se guisa y se come eso ? ¿No aparcar como escritora? ¿De dónde se sacas el tiempo para la pluma y acabar otra novela?
Pues se come con tiempo. Yo nunca me he dedicado sólo a escribir, siempre lo he compaginado con otros trabajos, a veces con más de uno a la vez. Ahora, desde la Dirección General de Cultura y Patrimonio, lo que tengo es mucha más responsabilidad. Ahora no tengo un jefe, tengo más de cinco millones de jefes ante los que he de rendir cuentas, y eso ha hecho que me haya costado escribir esta novela mucho más que cualquier otra, me ha resultado mucho más difícil llegar a casa y desconectar, aparte de que, lógicamente, es una etapa de mucho trabajo. Pero al final una es lo que es, y yo soy escritora. Escribir es una necesidad, que está por encima de otras muchas como dormir o salir a cenar. He escrito esta novela robándole muchas horas al sueño, cuando en mi casa todos dormían ya.
¿La vida política te ha proporcionado más perspectiva como escritora?
La vida en la política de primera línea, de la gestión, me ha proporcionado una perspectiva diferente como persona. El trabajo es muy gratificante, pero también muy duro y sobre todo, muy diferente a cómo se ve desde fuera. Esa ha sido una de las primeras cosas que he aprendido. La vida en la política me ha hecho, me está haciendo, más paciente, más observadora, más calmada, o en eso trabajo, y estoy convencida de que eso acabará colándose en mí como escritora.
Tras las cifras de mujeres muertas a manos de la violencia machista, que no para, ¿cuál es tu visión de la situación actual de las mujeres? ¿crees que hay alguna fórmula para parar este terrorismo machista que a pesar de que la información va en aumento?
Creo que hay que cambiar las leyes al mismo tiempo que hay que abordar el terrorismo machista desde la educación. Enseñar a los niños en términos de igualdad y de auténtico respeto. Pero la fórmula no la tengo. Ojalá.
La familia siempre está presente, tus hijas, tu casa y las cosas más sencillas que las elevas a maravillosas… ¿Qué importancia tiene esa parcela en tu labor como escritora? ¿Son fuente de inspiración?
Son fuente de vida. Con eso creo que lo digo todo.
Eres un no parar Carmen ¿Tienes en la cabeza otra novela?
Sí. ¡En la cabeza y en el ordenador! Después de lo mal que lo he pasado pensando que no sería capaz de terminar ‘Basta con vivir’, he decidido no descansar entre una y otra, aprovechar el impulso. Yo me siento realmente mal cuando no escribo, y aunque sea a costa de descansar menos, prefiero vivir con la energía que me da escribir