Lolín, Festera y Dolorosa hasta la médula, es la responsable del ensayo, interpretación y puesta en marcha de los tradicionales versos del ‘Encuentro’, que el Domingo de Resurrección, recitan l@s nin@s, en uno de los más emotivos y esperados actos de la Semana Santa Elianera.
Dolores Marco Marimón, más conocida en el pueblo como Lolín ‘La Cabrereta’, es una elianera como ella misma afirma “con mayúsculas”. Hija de Dolores Marimón, la tía Doloretes y de Vicente Marco Rubio ‘El Cabreret, Lolín afirma que sus apellidos aunque poblanos, tienen cepa elianera. Con mirada azul transparente y una alegría desbordante, la protagonista de ‘Gente de Aquí' de esta semana, nos cuenta que el apodo de ‘La Cabrereta’, le viene de su padre, que a su vez se lo pusieron, por un oftalmólogo - el Dr. Cabrera- que alguna vez le curó algún mal. “Cosas de pueblo de antes ”afirma con una amplísima sonrisa. Lolín nació en la calle del Carmen, la antigua calle Dels Jardiners. “Allí me crié en la casa familiar junto a mis padres y mi dos hermanos. Aquella Eliana era diferente de la de ahora, las puertas de las casas estaban siempre abiertas, nadie echaba la llave, los niños jugábamos en la calle y las mujeres lavaban en las eras y sacaban agua de alguno de los dos pozos que habían en el pueblo”. “Cuanto han cambiado las cosas explica, aunque felizmente para mejor”, cuenta, sin perder un ápice de su radiante optimismo. Viuda y con dos hijos – chico y chica- Lolín también ha pasado lo suyo. “He sufrido mucho, junto a mis padres, que por su ideología y forma de pensar, tuvieron que pasar por muy malos momentos. Era la época del miedo y del silencio. Nosotros los hermanos éramos muy pequeños y no entendíamos nada y nos enteramos de muchas cosas mucho más tarde. Afortunadamente hoy, podemos expresarnos, y gracias al trabajo del Centre d’Estudis Locals de L’Eliana y el Ayuntamiento, personas como mi madre, que fue la única mujer edil de este pueblo en tiempos del primer Consell en la República -relata con emoción contenida- han sido reconocidas . La palabra madre cobra dimensión en la boca de nuestra entrevistada. Lolín confiesa que esa palabra es muy grande y que para ella lo encierra todo: “Vida, alegría, pasión, fuerza, entrega. Es una palabra que está siempre presente en los ‘versets’ que ensayo todos los años, explica con entusiasmo, aunque siempre en su justa medida”. Y es que Lolín, Festera y Dolorosa hasta la médula, es la responsable del ensayo, interpretación y puesta en marcha de los tradicionales versos del ‘Encuentro’, que el Domingo de Resurrección, recitan los nin@s, en uno de los más emotivos y esperados actos de la Semana Santa Elianera. “Si, - afirma- es algo que hago desde el corazón”. Dueña de una memoria impresionante, ‘La Cabrereta’ puede recitar al instante, todos y cada uno de los más de los 16 versos diferentes, que se han recitado en este pueblo desde hace más de una década. “Los tengo todos recopilados en mi memoria. Siento el fervor y la emoción que encierra cada palabra, cada estrofa. Y quiero que los niñ@s se los aprendan pero también que los sientan. Ese es el secreto. Que conecten con el significado de los mismos, que los entiendan Por eso intento trasmitirles a ellos, a los padres y a las Dolorosas ese amor. Siempre les digo una cosa cuando empiezo los ensayos: Los versos son una sorpresa. Son como un traje de novia que no se puede enseñar hasta el día de la boda”. Llega el momento de despedirnos y como siempre le preguntamos a la entrevistad@ que es para ella L’Eliana. Con resuelta contundencia nos dice: “Es todo. Es un pueblo perfecto. El mejor. De aquí al cementerio”.