M Dolores Muñoz Sanchez

Gente de aquí
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María Dolores, Loli, como la llaman en confianza, lleva casi veinte años dedicada a lo que más le apasiona desde muy pequeña: los niños. Y es que para esta amiga y vecina de L’Eliana, los más pequeños de la casa han formado siempre parte de su vida. A ellos ha dedicado sus años de estudio y alrededor de ellos ha girado toda su vida profesional. María Dolores Muñoz fundó en 1993 el ‘Centro Infantil María Allende’ cuyo nombre escogió en homenaje a su pequeña sobrina que falleció con sólo cinco años. María Dolores ha sido pionera de las guarderías infantiles en L’Eliana abriendo su primer centro en la zona de les Casetes. María Dolores Muñoz declara: “he sacado adelante la guardería a fuerza de mucho sacrificio, constancia y dedicación. Todavía recuerdo cuando compré la primera furgoneta. Yo misma me encargaba de recoger y llevar a los niños a casa” comenta sin perder la sonrisa.

He sacado adelante la guardería a fuerza de mucho sacrificio, constancia y dedicación. Todavía recuerdo cuando compré la primera furgoneta. Yo misma me encargaba de recoger y llevar a los niños a casa"

En el año 2.000 María Dolores Muñoz le da un nuevo impulso a su centro y se traslada, a unas instalaciones en la zona de Les Taules, que ella define como “confortables” con 400 metros cuadrados construidos y mil metros de terreno. Sin embargo, a lo que María Dolores le otorga un verdadero valor es al proyecto educativo ‘María Allende’.Un proyecto integral en el que el aprendizaje de normas, la adquisición de hábitos, la comunicación y el cariño son fundamentales junto a actividades complementarias, pero no menos importantes, como las deportivas y los idiomas que, incorporadas en su justa medida logran la consecución de objetivos eficaces en el crecimiento y evolución del niño. Para esta profesional lo esencial estriba en lograr una educación en la que los pequeños se sientan seguros y encuentren el equilibrio entre el cariño y la disciplina. El centro infantil ‘María Allende cuenta en la actualidad con un equipo de ocho personas altamente cualificadas que hacen posible el desarrollo de esta labor diaria con los pequeños. En el plano personal, nuestra vecina habla tímidamente de esa otra faceta de su vida, la que compone su familia y de la que se confiesa sentirse también muy orgullosa.