Filomena Badía Coll

Gente de aquí
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Sin familia no tienes nada. Por eso me gustan estas fechas en la que por lo menos una vez al año nos reunimos todos aquí en L’Eliana. Justo en el horno, hacemos una celebración por navidad todos juntos, los más jóvenes, los hijos, los sobrinos, los primos, los nietos y los que todavía estamos.”

La Tía Filo nació un 3 de noviembre de 1925 en el Nº 4 de la calle Purísima de L’Eliana. Con una mirada azul llena de luz y una sonrisa espectacular, a sus 87 años la hija menor del matrimonio formado por Vicente Badía y Dolores Coll, fundadores del forn ‘Comes’ de L’Eliana nos recibe a media mañana en casa de su hija Carmen Torrent. La encontramos en plena faena dándole forma a los pastissets de boniato “hechos con la misma receta que mi madre nos enseñó a las tres hermanas cuando éramos unas niñas”. Filomena Badía Coll es una auténtica hija de L’Eliana, junto a sus hermanas Dolors y Francisca vivieron siempre en el pueblo, en el que formaron sus familias. Madre de cuatro hijos – Carmen, José Vicente ‘Pep’- , Lola y Salvador -habla de ellos con entusiasmo y verdadero orgullo. “Todos mis hijos, además de muy buenos, son muy inteligentes… Mi hijo Pep es el Director del diario El País en la Comunidad Valenciana, mi hijo Salvador está de párroco en Torrent y las chicas Carmen y Lola son extraordinariamente activas luchadoras y emprendedoras”. Con cinco nietos y un biznieto, la tía Filo, pertenece a esa saga de mujeres valientes y trabajadoras de L’Eliana siempre pendientes de sus familias y dispuestas a desplegar su ayuda en lo que sea menester con ese sabio hacer que sólo tienen las mujeres que han bregado mucho en la vida. “Empecé a trabajar muy pequeña, creo que tendría diez años. Me quedé viuda muy pronto y seguí trabajado muchísimo. Todavía no me he jubilado, cuenta alegremente. Pero para mí lo más importante siempre ha sido, es y será la familia. Sin familia no tienes nada. Por eso me gustan estas fechas en la que por lo menos una vez al año nos reunimos todos aquí en L’Eliana. Justo en el horno, hacemos una celebración por navidad todos juntos, los más jóvenes, los hijos, los sobrinos, los primos, los nietos y los que todavía estamos.”. A Vd. Y a sus hermanas se la han identificado casi siempre con el horno que fundó su padre, pero Vd. Además de estar allí en su juventud ha hecho muchas más cosas “ Si, claro, aquí en este edificio, la casa en donde nací ha habido otros negocios además de la casa familiar. L’Eliana eran cuatro calles y esta casa estaba casi el centro de todas ellas, con un corral precioso que daba al carreró (La actual calle Palacio) y muy cerca de la iglesia, aquí ha estaba el cine del pueblo. Durante años también regenté aquí mismo una pollería. Dispensábamos también conejos y la gente venía adrede de Valencia a recogerlos y hacían hasta una hora de cola”. ¿Qué recuerdos tiene de sus padres ahora que el horno lleva en funcionamiento casi 90 años? Con mucha ternura la tía Filo contesta: “Pues los mejores. Puedo resumirlo muy fácilmente: mi padre era un hombre bueno, bueno de verdad ,al que no le importaba ayudar y mi madre era una mujer inteligente, muy matriarcal que nos enseñó a no tenerle miedo al trabajo. Gracias a ellos aprendimos que lo más importante es estar todos siempre juntos”. Dulce y cariñosa la Tía Filo trasmite seguridad, esa seguridad que se adquiere con la experiencia de la vida.