¡QUÉ ASCO!

El Aguijon
Fuente

La grande bouffe

Si acaban Vds. de comer, será mejor que dejen la lectura de este comentario para otro momento.

Corría el 19 de julio de 2011 – apenas víspera de una dimisión llena de dudas, zozobra, amargura y traición a sus más allegados; y tan sólo un día después de una espléndida cena a tres, acompañados por la Sra. Rita Barberá, que brindó con horchata (¡qué campechanía!, ¡qué hermosa defensa de lo nuestro!), cuando el Sr. Francisco Camps - no se sabe por qué extraña razón - le firmó a su otro amiguito del alma, Bernie Ecclestone, un contrato que nos obligaba a los valencianos a pagarle cantidades astronómicas hasta 2020, para que se dignara a seguir concediéndonos el premio de Fórmula 1 que habría de “ponernos en el mapa” y a lo que sólo había accedido pocos años antes “si las elecciones las gana el PP”. Así, sin más. Sin un simple expediente administrativo, ni medio concurso público, ni ápice de mesa de contratación, ni consulta con expertos,…. Nada de nada de nada. Con un par.

En ese 2011 habían pasado ya tres años de la crisis que la mayor parte de los españoles sufrimos por haber “vivido por encima de nuestras posibilidades” y lo veníamos pagando con millones de parados, recortes en educación, sanidad, cultura, subempleos, salarios de risa, jóvenes emigrando y demás, que Vds. ya conocen y en lo que no insistiré para no agriarles la cena ni el sueño.

Pocos meses más tarde, en diciembre de 2011, la Generalitat del recién designado Sr. Fabra o mejor dicho, los valencianos, nos hicimos cargo de Valmor la empresa “telón” que organizaba el circo de los coches en Valencia, con una deuda de apenas 50 millones de euros. Lo hizo con más razón que un santo porque, de lo contrario, hubiéramos tenido que pagar una indemnización de 71 millones de euros pactados en el contrato que, pocos meses antes, había firmado el Sr. Camps. Me siguen, ¿verdad? De cajón. Gestión de la buena. Con dinero público. Con otro par.

¡Llanto y crujir de dientes, plebeyos! ¡Penitentes, purgad vuestras culpas! ¡Merecido lo tenéis, chusma inmunda, derrochadores! Vagos sin fundamento, faltos de conocimiento y emprendimiento. De ésta se sale con dolor (el vuestro), y… ¡sufriendo!, nos decían.

Ahora sabemos que durante la siguiente edición de la carrera, en 2012, en nuestra querida dársena del Puerto, los valencianos pagamos – sin comerlo ni beberlo, nunca mejor dicho – 191.582 euros, algo más de 30 millones de pesetas, en caterings de la zona VIP del circuito. A un promedio de 50 euros por comida, salen más de 3.000 gorrones – o 1.500 gorrones en dos ocasiones - entre los que seguro que no estábamos ni Vd. ni yo – condenados al fuego de la austeridad por malgastadores – pero seguro que sí estaban nuestros “salvadores” y sus amigos VIP: banqueros, grandes empresarios, notables, gente guapa y demás jauría.

Pero como siempre ha habido clases y siempre las habrá, el Sr. Ecclestone se reservó en el contrato – eso sí, con la mayor de las reservas - una exclusivísima zona “supersuperVip”, a la que sólo se accedía previo pago de 3.000 euros por cabeza, dónde su propia empresa de catering – la del Sr. Ecclestone, insisto– servía todo tipo de caprichos, no el simple catering de los simples VIP - a las grandes fortunas mundiales que le suelen acompañar. Total una menudencia: 53.000 euros que, como es natural, se comieron ellos, pero que pagó nuestra Generalitat, en nombre y agradecimiento de todos los valencianos por su presencia entre nosotros, pobres infieles.

Imagínense:

Tartaletas de Porra con Jamón - Brocheta de Salmón marinado con Pepino y Yogurt - Buñuelos de Bacalao con Miel de Caña - Camembert con Arándanos - Croquetas de Txipirones con Ali- Oli de Piquillos - Chistorra con Yuca - Langostinos Crujientes - Pirulí de Plátano con Beicon - Crujiente de Queso a la Menta - Ajoblanco con Aceite de Vainilla - Gazpacho de Remolacha -Torre gratinada de berenjenas, zucchini, tomates, jamón, queso y albahaca, con verdes de estación y tomates cherry - Compresión de taboule con brochette mediterránea de jamón crudo, aceituna, champignon, tomate cherry y perla de mozzarella - Ensalada de verdes con pollo a los cítricos papines, jamón crudo y aderezo de queso crema, limón y hierbas…y etc., etc., etc.

Dicho esto sin ánimo de exhaustividad, a simple título de ejemplo, y sólo para ir haciendo boca…

Ahora les ofrezco un pequeño espacio de respiro para que se concedan unos instantes de silencio y reflexión sobre todo lo anterior… Mediten, por favor.

…Y aún saldrá quién nos dirá que es a éstos a quienes deberíamos votar.

Peor todavía: aún habrá quien les hará caso y les votará.

Pues nada, que les aproveche. Y a por más…

Germán López-Guitián

Fuente: EL MUNDO de 22 septiembre de 2014. Articulo firmado por Juan Nieto.

Facturas en expedientes de contratación del último Gran Premio puestas a disposición de la Fiscalía de Valencia.