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 La vuelta al 'cole'

Los niños de L'Eliana recuperan su actividad diaria


Septiembre es ese mes en el que los gratos días de vacaciones se disipan y se adentran en aquel lugar de nuestra mente en el que se emplazan los recuerdos. Un tiempo de verano que se nos va y con él lo mejor de su día a día: horas de luz natural, calor, sol, juegos, siestas y piscina. Helados, colchonetas, bronceadores y sombrillas. Granizados y bicicletas. Paseos y libros. Ese ir y venir sin la presión de los horarios se esfuma. Queramos o no, ha llegado septiembre y de nuevo empieza todo.


 

cole_interior02Septiembre se instala con sus novedades, retos y oportunidades. Comienza el otoño, la ropa y calzado nuevo para el invierno, los libros del próximo curso, los nuevos profes, nueva aula, y, seguro también, nuevos compañeros de clase… Porque no nos olvidemos que septiembre supone para millones de niños el fin del verano y la vuelta al colegio.

A todo ritmo

Enfrentarse al primer día de clase crea tensión y ansiedad en los escolares y, en algunos casos, también en sus padres, sobre todo cuando el estudiante asiste al colegio por primera vez, inicia un nuevo ciclo académico o cambia de colegio. La angustia por la separación o la incertidumbre por encontrarse con nuevos profesores y compañeros se puede minimizar si los progenitores transmiten a sus hijos un enfoque positivo de lo que representa este cambio y no se dejan llevar por los nervios del primer día de horarios y novedades.

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 Alegría, música y color en los colegios de L'Eliana

Los peques empiezan a llegar sobre las 8.30 de la mañana. Llenan los patios de los colegios Virgen del Carmen, Garbí y L’Olivera con sus mochilas. Vienen de la mano de sus padres, madres y abuelos. Emoción  en  las caras.

cole_interior04Se escucha el alboroto del reencuentro entre alumnos y profesores. Los niños se persiguen, gritan, curiosean y algunos hasta lloran. Los padres intentan mantener la calma hablando unos con otros, se aseguran de que sus hijos llevan el almuerzo, van a la clase correcta, miran que la mochila esté bien cerrada. “Mi hijo no lo dice pero lo he notado muy nervioso, es nuevo en el colegio” comenta uno de ellos. La angustia por la separación o la incertidumbre se puede minimizar, de eso saben los profes.

En el Virgen del Carmen han preparado el encuentro con una alegre escenificación de toma de contacto  que se abre paso entre disfraces, decorados y música. Los nervios cesan entre la chiquillería que se agolpa en el patio del L’Olivera. Sus profesores interpretan una simpática coreografía al ritmo de la canción de Pulp Fiction. Un mensaje a sus pies: ‘Descobreix el mòn’. El optimismo impregna el nuevo curso.


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Familias y gasto

Al acabar el verano los padres se preparan para la vuelta a la realidad. Libros, materiales y ropa son las preocupaciones centrales de las familias en estas fechas. Son muchas las cosas que hay que organizar. Tiendas y centros comerciales de nuestra localidad se llenan este mes de papás que, calculadora en mano, hacen cuentas para afrontar los gastos del nuevo curso. “Entre ropa, libros y material llevo gastados 400 euros. Y tengo mellizas, con lo cual el gasto se multiplica por dos”, explica María José Valenzuela, presidenta de la AMPA del C.P. Virgen del Carmen de L'Eliana.

Las previsiones de gasto de cada familia varían en función de si los alumnos acuden a un centro público, privado o concertado. El coste por niño en un centro público cuesta alrededor de 300 euros, y en uno concertado o privado entre los 600 y los 700 euros, dependiendo de si necesita uniforme.

Estos presupuestos pueden reducirse si se huye de las primeras marcas, se comparan precios o si se realiza una compra escalonada. Los niños, por su parte, tienen sus preferencias que, casi siempre, suelen sobrepasar el mermado presupuesto de sus progenitores: “Yo quiero la mochila de Hulk”. “Pues yo quiero la de Hannah Montana”. Después de un verano con mucho juego y menos obligaciones, llega el momento de horarios y normas. No todos lo sobrellevan igual de bien. Tiempo al tiempo. Todo es cuestión de acostumbrarse.