Para mí L’Eliana es un pueblo que rebosa cultura, creación, vivencias y mucha energía positiva. Me encanta vivir aquí”.
Nora Pastor Gómez no nació en L’Eliana, ni siquiera lleva muchos años residenciada en nuestro pueblo al que llegó por casualidad. Sin embargo, para Nora, artista, escultora, ceramista, diseñadora de bisutería y, en su tiempo libre, también voz de un quinteto musical, vivir en L’Eliana ha sido todo un cúmulo inigualable de bendiciones, oportunidades y felicidad. “Nunca imaginé que este pueblo sencillo tuviera tanta capacidad de integración, solidaridad y vida en todos los sentidos. Por exigencias del guion, he vivido en muchos sitios, desde Valencia capital, que es donde nací, hasta Villareal, Segorbe, Gilet o La Canyada. Lugares que respeto y admiro, pero, para mí, vivir en L’Eliana no tiene parangón”.
Nora Pastor Gómez siempre ha estado relacionada con las artes. El dibujo, el diseño y la creatividad han sido sus compañeros de viaje desde muy pequeña. También la música y, más concretamente, el canto han formado parte de sus aficiones. Desde hace más de veinte años, ella es la voz del quinteto “Nora Pastor”, un grupo que interpreta ‘jazz’, ‘blues’ y ‘bossa nova’. Pero es de su destreza para el dibujo de donde nace lo que será más tarde su profesión. A los catorce años empieza a trabajar en distintas fábricas de cerámica en la ciudad de Manises. Allí, desarrolla su técnica para dibujar y pintar. “Mi madre me matriculó en la escuela de cerámica de aquella localidad y compaginé el trabajo con los estudios. Tengo que confesar que me gustaba más trabajar que estudiar. En aquellos años, me autoformé en muchas cosas básicas que quizá no hubiera aprendido desde la teoría. Soy autodidacta en casi todo, aunque asistí durante un año completo, en calidad de oyente, a la Escuela de Artes y Oficios de Valencia”.
Su habilidad en el dibujo y la capacidad de creatividad le han permitido a Nora su paso profesional por la cerámica industrial en la ciudad cuna de la misma: Villareal. Allí se desempeñó como creativa y diseñadora en fábricas de azulejos de renombre. “Aprendí mucho en esa etapa. Interioricé técnicas y recursos industriales cerámicos. Trabajé materiales, texturas y relieves para pavimentos y revestimientos desde diferentes prismas y conceptos empresariales. Toda una experiencia cerámica inspiradora y a la vez resolutiva que duró cerca de diez años. Mientras, toqué más palos. Ensayé con el volumen y el relieve. La escultura me atrapó”.
Es autora de varios grandes murales cerámicos en obras particulares. El gran umbráculo del Palau de Congresos de Peñíscola es una de sus obras más relevantes. Nora también trabaja en el diseño y composición de colecciones de bisutería cerámica.
¿Cómo llegas a vivir en L’Eliana?
“La verdad, que por casualidad. Tras vivir una nueva etapa en mi vida, una amiga me comentó la posibilidad de un chalet en el pueblo. Lo primero que pensé fue si me cabrían mis muebles, y, sobre todo, mis herramientas de trabajo. “Entonces me voy”, me dije. Y ha sido una de las decisiones más acertadas de mi vida. Aquí he encontrado amigos, talentosos artistas, movidas culturales, un pueblo en franco movimiento que me ayuda en mi proceso de continuo crecimiento y trabajo artístico”.
Nora Pastor está integrada en el primer colectivo escultórico de L’Eliana: ‘AlCubo’. “Son un grupo fantástico, diverso y enriquecedor. Una oportunidad más de relación y creación. Estoy francamente contenta de estar ahí”.
Cerramos nuestro encuentro con Nora con la pregunta de rigor en esta sección. ¿Qué significado tiene para ti L’Eliana? “Sin ninguna duda, L’Eliana es una gran oportunidad de vida. Un lugar en el que me siento muy acogida. Para mí L’Eliana es un pueblo que rebosa cultura, creación, vivencias y mucha energía positiva. Me encanta vivir aquí”.