Miguel Ángel Pastor

Gente de aquí
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Siempre me he sentido muy bien tratado y valorado, L’Eliana es el mejor lugar que he encontrado para vivir. Mi sitio siempre estará aquí”

Miguel Ángel Pastor tiene 56 años y no nació en L’Eliana pero como él mismo dice “algunos me llaman forastero pero yo me considero de aquí”. Y no es para menos porque es el hostelero más antiguo que existe en nuestro municipio. Yo nací en Catarroja, fui criado en Paterna y he vivido en L’Eliana la mayor parte de mi vida”, explica. Nos recibe en su restaurante ‘El Palacio’, uno de los más emblemáticos de nuestro pueblo, que regenta junto a su mujer Susi y empieza a contarnos su historia. “A mí de pequeño me llamaban ‘el tele’ porque mi padre era telégrafo. Me gustaba mucho cantar y aprendí a tocar la guitarra con once años. Y sigo haciéndolo a día de hoy. Vengo de una familia de músicos y hasta tengo un primo que fue manager de Nino Bravo”, comenta entre risas. Su afición por la música le llevó a participar en programas de radio y a actuar en locales, pubs y fiestas en general donde daba rienda suelta a toda su creatividad. “Ahora lo tengo un poco más aparcado, porque me dedico también a cultivar mis tierras. Así que se me han quedado las manos, más de agricultor que de artista” comenta Miguel sin perder la simpatía. Su madre, Purificación, y sobre todo su padre, Manuel, fueron las mayores inspiraciones de Miguel Ángel. “Mi padre sabía hacer de todo, era telégrafo, fotógrafo de Las Provincias, esperantista, inventor – logró realizar una rueda de coche divida en ocho segmentos que permitía que nunca se pinchara – sabía de electricidad, de obrería, de fontanería… y parte de todo eso lo llevo dentro de mi”, dice con una nota de nostalgia. Al padre de Miguel lo trasladaron a Paterna para trabajar de jefe de correos y toda la familia se vino con él. “Tras terminar el servicio militar yo me puse a trabajar con mi padre como interino y conocí L’Eliana”. Gabriel, el actual dueño del Restaurante El Chalet de L’Eliana, y Miguel decidieron unirse y montar un bar restaurante que todos conocimos como ‘El Carrer’ en la calle Francisco Alcayde. “Gabriel y yo somos amigos de la infancia y a los dos nos gustaba el mundo de la hostelería, apostamos por este proyecto porque en L’Eliana había una calidad de vida media-alta que se incrementaba sobre todo los meses de pascua y de verano”. ‘El Carrer’, un restaurante mítico en L’Eliana que aunque haya cambiado de dueños varias veces y otras tantas de nombre sigue conservando la misma decoración – a base de balcones y ventanas simulando una calle – que Gabriel y Miguel idearon en sus inicios. “La verdad es que es bonito que la mantengan porque se hizo con mucho cariño y a pesar de que han pasado varios años sigue estando casi como al principio”. A ‘El Carrer’ le siguieron otros locales como el restaurante ‘Foro’, ‘El Molino’ y el conocido ‘El Chalet’. “Era demasiado trabajo y no paraba en casa así que traspasamos ‘El Carrer’, ‘Foro’ y ‘El Molino’, Gabriel se quedó con ‘El Chalet’ y yo me monté ’El Palacio’ eso nos permitió pasar más tiempo con nuestra gente y ganar en calidad de vida. Su mujer Susi, siempre a su lado, es su apoyo más grande. “La conocí una noche en la que le cedí el asiento para que se sentara”, afirma, “¡como la engañé” dice riendo. Susi y Miguel trabajan codo con codo en el restaurante y aunque se pinchan mutuamente para hacerse rabiar se nota el amor y el compañerismo que les ha hecho estar juntos durante tantos años. Sus hijos, Carla y Miguel Ángel son su mayor tesoro y al hablar de ellos se le ilumina la sonrisa. “Carla trabaja en El Corte Inglés y Miguel está en Burgos de militar, esperando a ver si le sale plaza por aquí cerca. ¿Cómo te definirías Miguel? “Creo que soy una persona de pocos enemigos” dice. Y se nota. Los clientes que entran a ‘El Palacio’ se dirigen a él por su nombre y no resulta raro que cada persona que pase por la puerta del mismo se detenga a comentarle algo. “Yo soy feliz con mi familia, mi mujer, mis amigos, mi restaurante, mis huertecitos y mis pequeños proyectos así que no me puedo quejar mucho”, afirma. Hablador, bonachón y bondadoso, Miguel ha encontrado en L’Eliana el lugar donde asentarse y formar una familia. “Siempre me he sentido muy bien tratado y valorado, L’Eliana es el mejor lugar que he encontrado para vivir. Mi sitio siempre estará aquí”.

Enrique Martínez Escrivà