Vicente Zamora o Vicente Cervera, como le suelen decir por l’Eliana obviando su primer apellido, nació hace 52 años en la vecina localidad de Villamarchante. El destino laboral de su padre lo trajo hasta nuestro pueblo junto a sus padres y hermanos cuando solo tenía tres años. “Me considero de aquí. Siempre he estado unido a l’Eliana. Este el sitio al que pertenezco. Nunca he pensado en marcharme. Aquí lo tengo todo: mi mujer y mis hijas, mi casa, mis amigos y mis aficiones. Solo me ausento del pueblo para trabajar o salir algunos días de vacaciones. Mis amigos me suelen decir que siempre tengo el nombre de l’Eliana en la boca. Cuando gané las oposiciones en Iberdrola en el año 86 me destinaron a Sueca. Allí iba cada día a trabajar. Nunca se me ocurrió trasladarme de l’Eliana para acortar distancias –prosigue- y eso que en aquel entonces el trayecto era más largo porque no había autovía".
Correctísimo y educado en las formas, Vicente Zamora despide un halo de seriedad, equilibrio y confianza nada más entablar conversación con él. Felizmente casado hace más de 20 años, padre de dos chicas, Sonia y Carolina, nuestro entrevistado confiesa que para él la familia es lo más importante de su vida. Ellos ocupan y ocuparan siempre el primer lugar”.
Te criaste y estudiaste en l’Eliana. ¿Cómo era esa Eliana de tu niñez?
"Una Eliana muy distinta. Recuerdo que jugábamos en la calle. Era una Eliana sin coches en la que pasaban los labradores con sus carros. Todavía recuerdo por Pascuas irnos a Entrepins a comernos la mona en uno tirado por un burro. Era una Eliana preciosa y distinta a la de ahora. Nuestro pueblo yo digo siempre que es diferente. Lo era antes y ahora también. Ni mejor ni peor que otros. Es simplemente distinto".
Apasionado por el deporte en general y por fútbol en particular, una disciplina que ha practicado desde niño en los distintos equipos y categorías locales, Vicente es el presidente del Club de Fútbol Base L’Eliana desde hace unos años y entrenador en el mismo. Una afición que ha heredado su hija mayor Carolina que también forma parte del equipo femenino de la localidad.
¿De qué equipo eres?
"Del Valencia por supuesto – contesta con naturalidad- como si no pudiera ser de otra forma. Siempre me gustó el Valencia y el fútbol. De hecho de pequeño mi gran ilusión era ser futbolista profesional. Pero no pudo ser", comenta sin perder la sonrisa.
En la actualidad, Vicente Zamora ha tomado el relevo en la presidencia de la Asociación de Clubes Deportivos de l’Eliana a Pilar Soler García. "Me ha tocado relevarla tal y como está previsto en los estatutos de la asociación, de la que hasta ahora he sido su vicepresidente e integrante de su junta directiva".
Has afrontado este relevo en los momentos más álgidos del deporte en l’Eliana. Els Jocs Esportius, la Volta a Peu, las competiciones de los diferentes clubes y el inicio de curso ¿Qué tal este inicio tan cargadito de actividades?
"La verdad que muy bien. Estoy encantado con la organización, la manera como se gestiona la asociación, la profesionalidad de todos los que trabajan para el deporte en l’Eliana es incuestionable. Pili ha hecho una gran labor. Mi objetivo es que ese trabajo y esa gestión la conozca cada uno de los vecinos de este municipio con total trasparencia. Son 24 clubes, más de 100 monitores y casi 3.000 alumnos que se dan cita a diario en el Polideportivo de una manera ordenada y con la garantía de que desde la asociación ofrecemos muy buen deporte asequible a todos los vecinos. Eso lleva mucho trabajo a cuestas. Creo que se ha hecho y seguiremos haciendo una gran trabajo. Hacer deporte desde mi punto de vista no es un gasto, al contrario, es una inversión que hacemos en nuestra salud y en la de nuestros hijos".
¿Una labor que como presidente haces de una manera totalmente altruista no?
"Sí. Ni como presidente del Club de Fútbol, ni como vicepresidente en su momento de la Asociación y tampoco ahora como presidente he cobrado nunca. Eso me gustaría que quedara muy claro para todos. Mi único pago, -expresa emocionado- es el saludo cálido que me hacen en el pueblo los jóvenes por la calle cuando me dicen “Hola Presi”. Con eso ya tengo bastante y me siento agradecido.
¿Qué crees que es lo más importante que hay que hacer como presidente del Club de fútbol y como presidente de la Asociación de Clubes en general?
Bueno yo creo que es muy importante que impere la paz social en cada club. Que se escuche a los alumnos y a los padres. Situarnos de una manera realista en la práctica de cada deporte y de sus posibilidades de disfrutarlo. El deporte es importante para todos, incluso para la tercera edad, un colectivo que lo práctica de manera frecuente en el Polideportivo con gran ilusión. Estoy encantado con ellos. El deporte es para pasarlo bien.
¿Algún proyecto especial en el ámbito deportivo de l’Eliana?
La verdad es que mi sueño sería poder llevar a cabo algún evento deportivo especial. De calado. Que l’Eliana se convirtiera en la sede de un evento deportivo específico que la consolidara a nivel nacional. Tenemos grandes deportistas en el pueblo, profesionales importantes. Voy a trabajar para conseguirlo.
En las recientes elecciones municipales te vimos en la lista de Salva Torrent como concejal a la alcaldía de l’Eliana. ¿Te interesa la política?
La verdad es que no soy político. Me interesa trabajar para mi pueblo. Salva es mi amigo de la infancia. Uno de mis mejores amigos y simplemente lo hubiera acompañado si hubiera salido, como en tantas otras cosas, para trabajar codo con codo con él. Como él comparto el cariño por este pueblo. He sido fallero y presidente de la misma falla que él, la Virgen del Carmen, de la que también he sido fundador y su presidente. Son cosas que me interesan como el deporte. Pero no por la el poder sino por lo que arrastra para hacer pueblo. No olvidaré nunca una frase que me dirigió José María Ángel, ex alcalde l’Eliana durante mi última presentación como presidente de la falla : “Vicente es una de esas personas que hacen pueblo”.
Para terminar Vicente te hacemos la pregunta que siempre cierra esta sección ¿Qué es para ti l'Eliana?
L'Eliana es diferente, ni mejor ni peor. L'Eliana es mi orgullo.