Vine a l'Eliana con mi marido hace 50 años. El siempre quiso estar aquí. Adoraba l’Eliana. Y aunque salgo mucho y me desplazo también a los otros centros, aquí estoy como él quería, ayudando y apoyando a mis hijos, los profesores, los alumnos y sus padres, cada día. Una vida completa de la que me siento, muy feliz y satisfecha y jamás he dejado de confiar en mi misma y en los que me quieren, que son muchos. Un montón como dicen mis nietos.
María Luisa Marín de Monzonís, como ella prefiere que la nombren, es el alma mater del prestigioso Colegio IALE de L’Eliana. Un proyecto educativo que ha alcanzado las más altas cotas dentro del mundo de la enseñanza. Un centro referente a nivel local, nacional e internacional que en muy breve plazo cumplirá sus 50 años de existencia. Medio siglo -se dice pronto- lleno de trabajo, esfuerzo, dedicación y compromiso por parte de toda una saga familiar volcada en un propósito docente sin igual. “El mérito no es mío” explica Doña Marisa, con una sonrisa arrolladora y un brillo especial en la mirada. “IALE y todos los centros que giran en torno a este grupo educativo, es obra de mi marido: Ignacio Monzonís. Un hombre emprendedor, con una gran visión, muy vitalista. El supo como nadie encauzar nuestras expectativas y sueños en torno a la enseñanza creando este gran proyecto de vida, trabajo y docencia. Yo sólo he sido fiel a sus principios desde lo que mejor se me ha dado hacer en esta vida: enseñar. Un oficio al que he dedicado todos mis esfuerzos y energías. Nuestros hijos Alejandro, Director General del Grupo Educativo y creador de los colegios Británicos ELIAN’S en Nucía y Castellón, Elia Directora Financiera y Nacho colaborador, han continuado este proyecto que se ha expandido a toda la Comunidad Valenciana y anteriormente a Dublín, Concord, Boston y Londres. Todos hemos contribuido a que el Grupo Educativo IALE-ELIAN’S sea una realidad con pasado, presente y futuro” en unas instalaciones magnificas, con un profesorado altamente cualificado.
¿Cuántos años lleva como docente Doña Marisa?
Por lo menos 60 años. Para ser exacta 61. Siento no tener en este momento 25 para seguir en la brecha otros 60 más, con todas las oportunidades que brinda el mundo tecnológico de hoy. Aunque energía no me falta. Los profesores, los padres, los directores y por supuesto los niños siempre me ofrecen la oportunidad de descubrir algo nuevo y maravilloso dentro de la educación. Tenemos algo muy preciado que es la libertad para educar y enseñar. La libertad para aprender a pensar, para crear y para innovar. ¿Sabe el potencial que podemos desarrollar?
¿Cómo empezó su carrera como maestra y docente?
Mi padre que era todo un caballero pero además un hombre inteligente me dijo:”Hay que estudiar para mantener la mente en condiciones”. Y eso hice. Primero fui maestra y luego fui a la universidad y conocí a Ignacio. Como abogado trabajaba en Madrid pero entró en la empresa y la gestiono con la eficacia que le caracterizó. Luego me casé y siguieron los proyectos educativos con los alumnos que iban llegando. Tanto mi marido como yo buscábamos lo mejor. Así nos ocupamos de crear nuestras propias escuelas con aquellos elementos imprescindibles desde nuestros puntos de vista. Con aquello que deseábamos como docentes para nuestros hijos. Primero en Benicalap, en Valencia y en L’Eliana, el sitio en el que nació IALE. Un modelo de enseñanza bilingüe, al que se le aúna el deporte, la cultura, la música, las finanzas, los idiomas: inglés, chino, francés, valenciano, alemán y ruso. Tenemos Conservatorio de música propio y desde siempre residencia para alumnos con bastantes extranjeros. Todo ese conglomerado imprescindible para una excelente formación que es lo que ofrecen nuestros centros. Un proyecto valiente, innovador, perfectamente organizado al mismo tiempo que hecho desde la vocación por la docencia., refrendado por miles de estudiantes en casi 50 años.
¿Qué le produce más satisfacción de este gran proyecto educativo?
Sin duda no hay nada más gratificante que me saluden por la calle y me digan “Yo estudié en IALE, con Vd.” Y, que sean personas con carreras universitarias o profesionales, trabajadores preparados, casados, con hijos, triunfadores. Hay, cada vez más, hijos de antiguos alumnos en el colegio de L’Eliana, o en los centros británicos que tenemos Nucía y Castellón que forman parte del Grupo Educativo IALE –ELIAN’S’. Es una satisfacción unida a la responsabilidad de ser cada día el MEJOR.
Pero lo más importante, cuando hablo con estos alumnos, es su sonrisa. Una gran sonrisa en la que con toda seguridad hemos contribuido desde nuestros centros. A través de ellos hemos ayudado a su formación, a cultivar su mente y desarrollar su talento pero también a ser grandes personas. Ese es nuestro mejor estandarte. Tengo la sensación del sueño hecho realidad pero sobre todo del deber cumplido.
¿Pronto será el 50 aniversario del IALE en l’Eliana . ¿Qué echa de menos Doña Marisa Marín de Monzonís?
El reconocimiento por parte del pueblo de l’Eliana. No hemos recibido nunca ninguno aquí. El sitio que lo ha visto nacer y crecer. Lo digo con absoluta sinceridad. Hemos recibido galardones y distinciones desde todo el ancho de la geografía y desde muchísimas instituciones nacionales e internacionales. Algunas de ellas ciertamente importantes. Hemos llevado muy alto la bandera de España y de Valencia. Tuvimos centros y escuelas en Irlanda (Dublín), en EE.UU. (Concord y Boston) y en Londres. En otro orden de cosas por supuesto echo de menos a mi marido que faltó en 2010. Pero no por eso se empañan los logros. Mis hijos y sus cónyuges han respondido con creces, son emprendedores, trabajadores, con vocación. Estoy muy orgullosa de la labor hecha y de lo que con toda seguridad se seguirá haciendo.
¿Cómo define el proyecto educativo IALE?
Es un colegio con un perfil muy claro. Colegio bilingüe, que fomenta el deporte, la cultura, los idiomas, la investigación, la tecnología, la música, el arte y sobre todo que confíen en ellos mismos y tengan seguridad y afán de superación. Un colegio seglar, apolítico y católico. Somos un centro privado de enseñanza y educación en el que nos sentimos libres para desarrollar el talento de los niños y lo logramos. Siempre vamos un paso por delante y al terminar sus estudios son INTERNACIONALES, pueden estudiar en la universidad que decidan la carrera elegida.
¿Por qué el nombre de IALE al colegio? ¿Es casual o tiene un sentido?
Pues es sencillo son las iniciales de los nombre de mis cuatro hijos y encima suena bien. Se ha convertido en una marca. I=Ignacio, A= Alejandro, L= Luis, E=Elia-Ana en honor al pueblo que tanto quiso mi marido.
Vd. ha sido una mujer muy avanzada para su tiempo...
Si. Decididamente sí. Estudié una carrera, me dediqué a ella sin dejar de lado a la familia. He trabajado siempre. Todo eso se lo debo a mis padres y por supuesto a mí marido. A mi padre porque me ayudó a no estar quieta y saber el valor de las cosas. A ganarme la vida. Y a mi madre por su voluntad, su organización, planificación y amor por su familia, fue una gran emprendedora. En la familia está el eje de todo. Para mí de un valor incalculable. Eso lo he aplicado a la vida misma, en mi trabajo, en mi casa, con mis hijos y también ahora con mis nietos.
¿En su opinión cómo de importante es la familia en la educación de los hijos?
Se lo resumo rápidamente. Sin la familia no hay nada. El mejor de los colegios no es nada sin ella. La familia es fundamental. Los padres tienen una labor imprescindible. Ellos son los que nos ayudan con sus experiencias, a que sus hijos estén preparados aprendiendo y se sientan satisfechos, a que estemos unidos familia y colegio. No importa que sean padres separados, si tienen criterios claros de que los hijos pertenecen a ambos, que de ellos depende que sean felices y no los utilizan como “moneda de cambio”, todo lo referente a la buena educación se consigue.
Pero además de docente ¿Vd. se ha dedicado a otras obras?
Si la verdad es que estoy en muchos foros. No creo que los pueda enumerar todos en esta entrevista. Mi marido por ejemplo fue el fundador del Rotary Club de l’Eliana. Pertenecemos a la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados que otorga los premios Jaime I. Soy amiga del Museo Pio V, de la Fundación Broseta, fuimos Clavarios de la Pila de San Vicente hace 30 años. Soy Honorable Clavariesa desde hace 21. Ahora también estoy en la Asociación Vicentina de l’Eliana de la que fui su Clavaria de Honor hace dos años. Y con mucha ilusión también estoy en un colectivo de mujeres muy inteligentes que nos reunimos mensualmente en Valencia, hay profesoras, abogadas, amas de casa, periodistas, farmacéuticas, empresarias…. Un foro muy especial formado por unas 30 mujeres. En la “La Orden del Querer Saber” donde debatimos y hablamos de todo excepto de política, religión o sexo. Y la verdad es que hay temas muy interesantes sobre los que discutir y departir y realizamos obras benéficas ayudando a Caritas, a la Fundación Vicente Ferrer, Asociación Valenciana de Caridad, etc.etc.
¿Sigue viviendo en l’Eliana?
Si, aquí vine con mi marido hace 50 años. El siempre quiso estar aquí. Adoraba l’Eliana. Y aunque salgo mucho y me desplazo también a los otros centros, aquí estoy como él quería, ayudando y apoyando a mis hijos, los profesores, los alumnos y sus padres, cada día. Una vida completa de la que me siento, muy feliz y satisfecha y jamás he dejado de confiar en mi misma y en los que me quieren, que son muchos. Un montón como dicen mis nietos.